Cuidado del auto

El motor de tu vehículo funciona cerca de los 90° C, si el calor sobrepasa esta cifra, los problemas graves se podrían desencadenar. El calor es el peor enemigo del motor; puede deteriorar la calidad del aceite, dañar los sellos de la válvula y otras piezas.

¿Cómo saber si tu auto sufre un calentamiento excesivo? Cuando el indicador de la temperatura del tablero pasa de lo normal a la marca roja (caliente). En este caso, toma las medidas necesarias para evitar problemas mayores.

1. Detén el motor: Lo primero que debes hacer es detener el auto. No importa si estas cerca de tu destino, busca un espacio estable para aparcar y así continuar con el siguiente paso para disminuir la temperatura. Si detener el desplazamiento es complicado; apaga la ventilación, enciende las luces de emergencia y continúa a ritmo lento hasta que puedas parar.
2. Levanta el cofre: Si el motor no está demasiado caliente, levanta el cofre para que la temperatura descienda. Si de lo contrario la temperatura es demasiado alta (sale vapor del auto), es recomendable esperar más tiempo hasta que disminuya. Es importante que nunca quites la tapa del radiador mientras el motor permanezca caliente, pues este tiene en su interior vapor que podría causar quemaduras graves.
3. Activa la calefacción: Puede parecer contraproducente, pero el sistema de calefacción funciona al succionar el calor producido por el motor y llevarlo al interior. Así que si activas la calefacción al máximo, el calor se disipará.
4. Rellena el nivel de refrigeración: Las principales causas de un calentamiento es la falta de refrigerante. Verifica el nivel y rellena el depósito hasta alcanzar la línea máxima. Te recomendamos utilizar este producto por las propiedades que contiene, pero de no tenerlo, recurre al agua simple. Solo recuerda llevar el auto con el mecánico para extraerla, porque con el tiempo, el agua produce oxidación y corrosión de los metales. Procura llevar siempre una botella de anticongelante en tu auto para cuando se requiera.

5. Examina fallas: Mientras esperas que el vehículo se enfría, verifica todo el sistema de refrigeración. Observa detenidamente los tapones del radiador y pon atención en las fugas de líquido por el área. Si detectas alguna falla, acude al mecánico para una revisión.
6. Conduce lento: Cuando la temperatura disminuya, podrás retomar tu camino; procura mantener una velocidad baja y vigila constantemente el indicador en el tablero. Si se vuelve a elevar, estacionate de nuevo y pide atención o llama a una grúa.

Si los problemas de calentamiento del motor persisten, es mejor que acudas a una evaluación con el mecánico para resolver el problema. Si el auto continúa trabajando de esta forma durante un largo periodo de tiempo, podría generar daños colaterales.

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